La segregación entre sexos todavía se aplica en la ultraconservadora sociedad saudí. Los avances son timidísimos y, recientemente, el rey Abdullah anunció que las mujeres podrían votar en las elecciones de 2015. Pero lo cierto es que las saudíes siguen sometidas a la custodia de un varón, que puede ser el padre, el marido o, en su defecto, otro hombre de la familia. Sin su autorización no pueden -entre otras cosas- trabajar, viajar al exterior o ser intervenidas quirúrgicamente. Tienen prohibido, además, conducir vehículos. Una mujer que infringió esta norma fue condenada el año pasado a diez latigazos.
Un reportaje “científico” publicado en Arabia Saudí afirma que el levantamiento de la prohibición de conducir a las mujeres acabaría con la virginidad.
El informe también advierte que esta medida haría aumentar la homosexualidad y la pornografía. El estudio predice un aumento en la prostitución y el divorcio.
Estas conclusiones han sido presentadas por los “eruditos musulmanes” en el “Maylis al-Ifta’ al-A’ala”, el más alto consejo religioso de Arabia Saudí, en colaboración con Kamal Subhi, un ex profesor de la Universidad Rey Fahd.
El estudio se realizó para evaluar el posible impacto de la derogación de la prohibición de conducir a las mujeres en Arabia Saudí. Este país es el único lugar del mundo donde a las mujeres no se les permite conducir un vehículo, entre otras muchas cosas…
No hay que olvidar que el 87% de quienes tienen esa titulación (enfermera) en España son mujeres. La decisión se produce en un momento difícil porque el paro golpea a las enfermeras como nunca lo había hecho. Según el Observatorio de Empleo Enfermero, actualmente hay en España 16.375 profesionales sin trabajo (la tasa es de un 6,63%), a las que habría que sumar las más de 9.000 que han acabado la carrera en junio de este año “sin posibilidad alguna de trabajar”. El asunto es aún más sangrante si se tiene en cuenta que se trata de un colectivo que apenas había sufrido el desempleo. De hecho, en solo dos años, casi se ha triplicado la cifra de paradas.
Por eso, la solución está en el extranjero. Pero no en Arabia Saudí…
Más información…
Raad Salam Naaman, Desvelando el Islam, Editorial Monte Riego (León) 2012