El viernes día 13 de Noviembre 2015, Francia ha vivido otra noche de terror y de regicidios en los que 129 personas inocentes murieron. Es una fecha muy triste para todos los que amamos la vida, la paz, la libertad y la democracia, sobre todo para los que hemos vivido de cerca el terrorismo islámico, que hemos sufrido la persecución y el genocidio en nuestra propia carne a manos de los radicales musulmanes, que conocemos bien el Islam y los musulmanes, sus fuentes de la Ley y sus objetivos principales.
Llevo más de veinte años advirtiendo, reclamando al cielo y la tierra, que Europa sufrirá a causa de sus contradicciones y sus medidas vergonzosas frente la amenaza y el crecimiento del Islam y los musulmanes en el Viejo Continente, moviéndose entre el “liberalismo- pluralismo” y la alianza progre-izquierdista-musulmana.
Lo que vemos, escuchamos y leemos en los medios de comunicaciones, en estos días, acerca del Islam y los musulmanes es una mezcla confusa de propaganda relativista. Cuando los musulmanes, sus lides y sus Imames, nos quieren vender la idea de que el Islam es una religión de paz y no tiene nada que ver con el terrorismo.
Me llamó la atención, el siguiente; Comunicado de la Comunidad Islámica en España sobre los crímenes de los musulmanes en Paris, Francia.
“La comunidad islámica en España se hace eco del dolor y expresa un gran pesar por los ataques terroristas del pasado viernes en París. Queremos trasmitir nuestras más sinceras condolencias a las familias de los fallecidos y nuestro deseo de una pronta recuperación a los heridos.
Una vez más se comete un acto de terrorismo en nombre del Islam y se coloca a la comunidad musulmana en entredicho. Tanto estos actos como los ataques indiscriminados en diversos países del mundo son rechazados sin ningún género de dudas por los musulmanes definiéndolos como acciones criminales.
En ningún caso estas aberrantes acciones terroristas son imputables a cualquier enseñanza del Islam y esperamos del estado soberano de Francia una rigurosa investigación en aras de aclarar minuciosamente los hechos.
Pido a Allah que haga prevalecer la verdad, Amín.
NOVIEMBRE 14, 2015 3:53 PM1 COMMENTVIEWS: 722
Malik A. Ruiz
Presidente”
Dice el comunicado, sin complejo ni cortedad “En ningún caso estas aberrantes acciones terroristas son imputables a cualquier enseñanza del Islam y esperamos del estado soberano de Francia una rigurosa investigación en aras de aclarar minuciosamente los hechos”.
Mentira, el Corán, el libro sagrado de los musulmanes, permite a los musulmanes la mentita y describe su dios “Allah” como el dios de la intriga, le llama el mejor de los intrigares. (Sura 8:30) “Y cuando los infieles intrigaban contra ti para capturarte, matarte o expulsarte. Intrigaban ellos e intrigaba Allah, pero Alá es el Mejor de los que intrigan”. De una vez por todas, hay que llamar las cosas por su nombre. El Islam es una gran amenaza para nuestra civilización. El Islam es uno de los problemas mayores que tiene el mundo actual, uno de los principales peligros para la paz de nuestra época, especialmente para el Occidente. El Islam está fundamentado sobre la conquista militar. La historia del Islam, desde su nacimiento está atestada de violencia y guerra, fue trascendido por “el filo de la espada”, hasta el presente. Si seguimos la pista de la vida privada de Muhammad, el Profeta del Islam, observamos que vivió para satisfacer sus deseos carnales. Muhammad mató y ordenó matar a miles de personas, organizó, participó y luchó en varias decenas de batallas en menos de diez años desde el año 622 hasta su muerte en el año 632.
Un análisis de la historia del Islam y su libro sagrado Al Corán, revela claramente, el espíritu violento que caracteriza la fe islámica.
Según la traducción musulmana, Muhammad el profeta de los musulmanes, en Medina gozó de constituir y estructurar una comunidad y un estado, siendo él mismo el líder religioso, jefe político y caudillo militar. No obstante, hay que reconocer que en la historia musulmana y en el propio Corán quedan testimonios de violencia liderados por el propio Muhammad. La historia registra la masacre de los judíos en la Península árabe (Al Medina), entre los años 624 y 627. Cuando Muhammad, ordenó y participó en la decapitación de más de 3000 hombres de las tribus judías Banu Quraida, Nadir, Qonaiqona’, Mustalaq y Jaybar, además de las mujeres judías que fueron capturadas como esclavas sexuales. La primera víctima de Muhammad y sus seguidores, fue una importante tribu judía, llamada Banu Quraida, que se negó a aceptar el Islam y el liderazgo de Muhammad. Como consecuencia y por las órdenes del mismo, todos los hombres fueron decapitados y las mujeres y los niños fueron convertidos en esclavos, entre ellas Rayhana, quien fue convertida en concubina y esclava sexual personal de Muhammad por el resto de su amarga vida. Poco después, las fuerzas islámicas dirigidas por Muhammad destruyeron, la tribu judía de Banu Al Nadir, sus cultivos, sus tierras y sus pertenencias fueron confiscadas, sus niños condenados a la hambruna, violaron a las mujeres y los hombres fueron asesinados, a la cabeza su jefe Kinana bin Al-Rabi’, que fue torturado por orden de Muhammad para que revelara el lugar secreto donde su tribu guardaba un tesoro, y al no lograr someterlo, Muhammad lo decapitó y luego tomó forzada a su mujer Safia como la novena esposa y esclava sexual personal de Muhammad. Para el Islam y los musulmanes, el ejemplo de Muhammad es sagrado. Todo lo que hizo fue bueno y digno de ser imitado, incluyendo sus conquistas y matanzas. Después de la muerte de Muhammad, sus sucesores, los califas, se dedicaron a conquistar grandes pueblos y ciudades, aplicando y siguiendo las indicaciones de su Profeta en el Corán y la sunna (Shari’a- Ley islámica). Expulsando familias enteras de sus hogares, hombres decapitados, mujeres y niñas violadas, niños esclavizados imponiendo su brutal dominio por la espada.
El Corán, el libro sagrado de los musulmanes, no es un libro sagrado ni religioso sino es un libro violento, lleno de odio y discriminación. El Corán es responsable de todo el terrorismo que estamos viviendo en los últimos años donde miles de personas han perdido sus vidas. El principal justificante de mis declaraciones son los versículos del mismo Corán que ordenan la violencia y la matanza. Son cientos de versículos en el Corán que hablan repetidas veces de todo lo que no permite, cual que religión divina, la civilización, la humanidad ni el mundo moderno. Os presento algunos versículos pero muy importantes para daros la razón sobre mi acción contra el Corán.
La superioridad de los musulmanes sobre todos los pueblos del mundo, está apoyado en las enseñanzas del Corán. Uno de los aspectos más características del Islam es la fuerza del vínculo que une entre sí a los fieles, a pesar de los inevitables roces en este mundo. Los musulmanes se muestran orgullosos de ello y a los predicadores les gusta repetir este versículo (Sura 3:110) “Sois la mejor comunidad humana que jamás se haya suscitado: ordenáis lo que está bien, prohibís lo que está mal y creéis en Allah. Si la gente de la Escritura creyera, les iría mejor. Hay entre ellos creyentes, pero la mayoría son perversos”. Esta comunidad, fundada y dirigida por Muhammad, fue cimentada según Al Corán por la gracia de Allah que reconcilió a los árabes desunidos y los hizo hermanos (Sura 3:103) “Aferraos al pacto de Allah, todos juntos, sin dividiros. Recordad la gracia que Allah os dispensó cuando erais enemigos: reconcilió vuestros corazones y, por su gracia, os transformasteis en hermanos; estabais al borde de un abismo de fuego y os libró de él. Así os explica Allah Sus signos. Quizás, así, seáis bien dirigidos”. Allah es el gran señor y el protector de la comunidad en la que todos los musulmanes son hermanos y miembros de pleno derecho; (Sura 49:10) “Los creyentes son, en verdad, hermanos. Reconciliad, pues, a vuestros hermanos y temed a Allah. Quizás, así, se os tenga piedad”. Pero, no deben de aceptar como amigos sin reserva, o miembros de pleno derecho en la comunidad, a los judíos, a los cristianos, a los paganos, a los no musulmanes; (Sura 5:51) “¡Creyentes! No toméis como amigos a los judíos y a los cristiano. Son amigos unos de otros. Quien de vosotros trabe amistad con ellos, se hace uno de ellos. Allah no guía al pueblo impío”.
El contexto de este versículo indica claramente que el Islam no permite a hacer amistad con los infieles, los judíos y cristianos, son enemigos declarados a los musulmanes, es un imperativo claro. Este versículo tiene una gran importancia en el Islam, por eso se repite varias veces en el Corán (Sura 4:34, 89, 101, 144) (Sura 5:33, 57, 82) (Sura 49:15).
El Corán habla mal de los cristianos, judíos, infieles y paganos. El estatuto de los judíos y de los cristianos está regulado por un famoso versículo y ordena a sus lectores a matar a los infieles dondequiera que le hallareis (Sura 9-28-29) “Creyentes los asociadores (los cristianos por asociar Jesús con Allah) son mera impureza. Que no se acerquen, pues, a la Mezquita Sagrada después de este su año Si teméis escasez, Allah os enriquecerá por favor Suyo, si quiere. Allah es omnisciente, sabio. Combatid contra quienes, habiendo recibido la Escritura (judíos y cristianos), no creen en Allah ni en el último Día, ni prohíben lo que Allah y Su Enviado han prohibido, ni practican la religión verdadera, hasta que, humillados, paguen el tributo directamente”. Con este versículo los judíos y cristianos, desde el comienzo del Islam hasta hoy día, pasan a ser declarados ciudadanos de segundo grado en su propio país y objetivo para el Yihad individual y colectivo de los musulmanes. El Shej Jeque Saudí AbdulRahman bin Nasr Al-Sady, un “sabio” musulmán e intérprete del Corán en su libro “Explicación del Corán” dice: “este versículo anima o permite a los musulmanes a hacer Al Yihad, perseguir, atacar y matar a los incrédulos; judíos y cristianos y a todos aquellos quienes no practican la religión verdadera (Islam)”.
Al Yihad es una orden que procede de Allah, y que la transmitió Muhammad a sus seguidores para siempre. Es un imperativo universal y para todos los tiempos según el Islam en (Sura 9:5) “Cuando hayan transcurrido los meses sagrados, matad a los asociadores dondequiera que les encontréis. ¡Capturadles! ¡Sitiadles! ¡Tendedles emboscadas por todas partes! Pero si se arrepienten, hacen la azalá y dan el azaque, entonces ¡dejadles en paz! Allah es indulgente, misericordioso”. Este confirme lo que dice el Corán en (Sura 9:123) “¡Creyentes! ¡Combatid contra los infieles que tengáis cerca! Que os encuentren duros! ¡Sabed que Allah está con los que Le temen!”.
Cuando el Islam comenzó a demostrar su superioridad militar, se dio la orden de luchar hasta el fin (Sura 9:13-15) “¿Cómo no vais a combatir contra gente que ha violado su juramento, que hubiera preferido expulsar al Enviado y os atacó primero? ¿Les tenéis miedo, siendo así que Dios tiene más derecho a que Le tengáis miedo? Si es que sois Creyentes. Combatid contra ellos, Dios les castigará a manos vuestras y les llenará de vergüenza, mientras que a vosotros os auxiliará contra ellos, cuando así los pechos de gente Creyente. Y desvaneciendo la ira de sus corazones. Dios se vuelve hacia quien Él quiere. Dios es omnisciente, sabio. Creyentes”.
La palabra “Yihad جهاد” aparece centenares de veces y se traduce de lo mismo “combatir o luchar”, y como ejemplo (Sura 9:19-20) “¿Consideráis que proveer el agua durante la Peregrinación y ser guardián de la Mezquita Inviolable es igual que creer en Allah y en la Ultima Vida y luchar جهاد en el camino de Allah? Los que creen, emigraron y lucharon جهاد en el camino de Allah con sus bienes y personas, tienen el máximo grado ante Allah y ésos son los triunfadores”. (Sura 66:9) “¡Profeta! Lucha جهاد contra los que se niegan a creer y contra los hipócritas y sé duro con ellos”.
Entre los miembros de la comunidad, Al Corán denuncia todavía a los hipócritas y a los musulmanes aprovechados que siguen un doble juego (Sura 9:73) “Profeta; combate contra los infieles y los hipócritas, sé duro con ellos”. Se muestra severo asimismo con los beduinos que sólo buscan su propio interés y su botín más que la victoria del Islam; (Sura 9:97) “Los beduinos son los más infieles, los más hipócritas y los más propensos a ignorar las leyes contenidas en la revelación de Allah a Su Enviado”.
En muchos países del mundo Occidental, los partidos políticos de la Izquierda más bien los comunistas, defendían al Islam y los derechos de los musulmanes, apoyando en la libertad y la democracia. Está claro que tanto el comunismo como el islamismo tienen el mismo objetivo es el resentimiento y acabar con la iglesia. Lo que no saben los comunistas que un musulmán antes de matar un judío o un cristiano, mata un pagano, ateo e infiel, no cree en Allah.
El Corán contiene al menos 255 versos que llaman a los musulmanes a la guerra contra los paganos, los infieles, los no creyentes en el Islam; los judíos y cristianos. Esto comprueba totalmente con la orden e imperativo abierto y para todos los tiempos que se da en el texto del Corán a los musulmanes en todos los lugares de la tierra. Algunos son muy gráficos, con la orden explicita de cortar cabezas y manos y matar a los infieles dondequiera que estén escondidos. Desde el nacimiento del Califato Islámico en Agosto de 2014, ha dado al mundo una muestra de la barbaridad del Islam. Algunos arabistas e islamistas, excusan estos actos como que no tienen nada que ver con el Islam verdadero. En realidad, ISIS es la cara verdadera del Islam, el pensamiento, las ambiciones, los dichos y los hechos de ISIS, están basados en la ley islámica. El Corán decreta a los creyentes la decapitación de los infieles, (Sura 8:12) “Cuando vuestro Señor inspiró a los ángeles: Yo estoy con vosotros. ¡Confirmad, pues, a los que creen! Infundiré el terror en los corazones de quienes no crean. ¡Cortadles el cuello, pegadles en todos los dedos!” y (Sura 47:4) “Cuando sostengáis, pues, un encuentro con los infieles, descargad los golpes en el cuello hasta someterlos. Entonces, atadlos fuertemente. Luego, devolvedles la libertad, de gracia o mediante rescate, para que cese la guerra. Es así como debéis hacer. Si Allah quisiera, se defendería de ellos, pero quiere probaros a unos por medio de otros. No dejará que se pierdan las obras de los que hayan caído por Allah”. Los musulmanes que no se unen a la lucha son llamados hipócritas y se les advierte de que Allah les enviará al infierno si no participan en estas masacres, (Sura 48:29) “Muhammad es el Mensajero de Allah, y los que están con él son despiadados con los infieles”. El Corán se muestra severo con quienes se niegan a financiar las guerras de la comunidad o intentan dispensarse del servicio sin razones; (Sura 9:81) “Los dejados atrás se alegraron de poder quedarse en casa en contra del Enviado de Dios. Les repugnaba luchar por Dios con su hacienda y sus personas y decían: No vayáis a la guerra con este calor. Di: El fuego de la gehena en aún más caliente. Si entendieran”.
Los musulmanes nunca tienen sentimientos de culpa tras las matanzas de infieles. Porque el Corán les traslada el sentimiento de que no hacen nada malo matando a los infieles. Las palabras del Corán en (Sura 8:17) “No erais vosotros quienes les mataban, era Allah Quien les mataba. Cuando tirabas, no eras tú quien tiraba, era Allah Quien tiraba, para hacer experimentar a los creyentes un favor venido de Él. Allah todo lo oye, todo lo sabe”. Esto significa que los musulmanes no tendrán ninguna culpa al matar a un infiel porque es el deseo de Allah y Allah solamente está utilizando sus manos para matar a los infieles. Allah les promete la victoria; los que mueran en la lucha recibirán el paraíso (Sura 9:111) “Allah ha comprado a los Creyentes sus personas y su hacienda, ofreciendo, a cambio el Jardín. Combaten por Allah matan o les matan. Es una promesa que Le obliga, verdad, contenida en la Torra, en el Evangelio y en el Corán. Y ¿quién espeta mejor su alianza que Allah? Regocijaos por el trato que habéis cerrado con Él. Ese es el éxito grandioso”.
Todo musulmán, tiene la obligación de respetar, creer y aplicar en cada uno de los versículos del Corán a pesar de que en el publico pretendan de ser musulmanes moderados. Y si, aplican creen y respetan todos los versículos del Corán, eso significa que también creen y aplican todos aquellos versículos violentos que llevan mensajes del Yihad, odio hacia los infieles, los judíos y los cristianos, discriminación contra las mujeres…etc. Los musulmanes “verdaderos” nunca tienen la opción de elegir, están llamados a la aplicación de las enseñanzas del Corán contra no-musulmanes. Así, pues no es posible, que los musulmanes dicen que son verdaderos musulmanes, creen en el Corán y por otro lado dicen que son musulmanes moderados y no creen en la violencia. Un musulmán estrictamente siempre es un musulmán que sigue la educación y las doctrinas del Corán, es la pura verdad, según (Sura 4:56-57) “A quienes no crean en Nuestros versículos les arrojaremos a un Fuego. Siempre que se les consuma la piel, se la repondremos, para que conozcan el castigo. Allah es poderoso, indudable. A quienes crean en Allah y obren bien, les introduciremos en jardines por cuyos bajos fluyen arroyos, en los que estarán eternamente, para siempre. Allí tendrán esposas purificadas y haremos que les dé una sombra espesa”.
Muchos occidentales, no toman en serio estos versos. Sin embargo, los musulmanes, sus Imanes, Mulás, los clérigos y los eruditos islámicos, no dudan para nada en las palabras del Corán, que son palabras de Allah, no eran ni son palabras vacías, sino realidades religiosas e incorporadas a su programa de vida.
Algunos musulmanes o lectores de Al Corán excusan o dicen que no todo Al Corán es violento, que se inicia con casi 124 versos de paz. Es verdad, antes de la Hégira, la propaganda religiosa se desarrollaba de modo pacífico. El Corán es formal al respecto: “…con sabiduría y buena exhortación, llama al camino de tu Señor. Discute con ellos de la manera más conveniente” (Sura 16:125). “Repele el mal con algo que sea mejor” (Sura 23:96). “Y no discutáis sino con buenos modales con la gente de la escritura” (Sura 29:46). “No es igual obrar bien y obrar mal. Repele con lo que sea mejor y he aquí que aquél de quien te separe la enemistad se convertirá en amigo ferviente” (Sura 41:34). Estos versículos y otros más, que con frecuencia tren a cuento a los imames musulmanes, escritores, periodistas, políticos…etc. para elogiar al Islam, pertenecen al período mecano. Más tarde, en Medina, el tono de Al Corán cambia, sube de grado y se convierte en agresivo. Efectivamente, en Medina, una vez asegurada su posición como jefe político y religioso, Muhammad escribe mensajes que muestran su carácter agresivo y amenazador. Conforme a una ciencia muy conocida en el Islam, que se llama Al Nasij wa Al Mansuj, que se puede resumir en estas palabras: los últimos versos invalidan o anulan completamente los más antiguos. Esta orden que alienta la violencia, invalida los 124 versos anteriores que instan a la paz. Es Al Yihad, la guerra santa, instituida en vistas a la propagación de la fe musulmana. Participar en Al Yihad, es practicar un acto de culto agradable a Allah. Esto es lo que proporciona el combustible que justifica Al Yihad en las mentes musulmanas (Sura 9:3) “Habla en nombre Allah y Su Enviado Muhammad, dirígete a los hombres el día de la peregrinación mayor. Allah no es responsable de los asociadores (cristianos y judíos), y Su Enviado tampoco. Si se arrepienten será mejor para ellos. Pero, si no obedecen, toman la espalda, sepan que no escaparán de Allah. ¡Anuncia a los infieles (cristianos y judíos) un castigo doloroso!”. De acuerdo con escolásticos musulmanes, las palabras árabes Nasij wa Mansuj son ambas derivadas de la misma palabra Nasaja, que significa “abolir, reemplazar, abrogar”. El Nasij (participio activo), “la abrogación” y mansuj (pasivo) significa “lo abrogado”. En conclusión, en lenguaje técnico, mansuj se refiere a ciertas porciones coránicas que conforme a la religión islámica son reveladas, han sido “abrogadas” por las otras más recientes. En palabras simples: para los fundamentalistas, aquellos que, entienden el texto del Corán de manera literal, interpretan que los versos más virulentos abrogan los más pacíficos… ¡Los violentos tienen prioridad sobre los pacíficos!
Con toda la cara, el comunicado concluye “pidiendo a Allah que haga prevalecer la verdad”. ¿Qué quiere decir? La única verdad para los musulmanes es el Islam. Eso lo que enseña, Muhammad el Profeta de los musulmanes, en (Sura 9:33) “Él es Quien ha mandado a su Enviado con la Dirección y con la religión verdadera para que, a despecho de los asociadotes, prevalezca sobre toda otra religión”, que dice claramente que el Islam es la única religión verdadera y tiene que sustituir a las demás religiones, si o si, por la paz o mediante Al Yihad “la guerra Santa”. Esta orden permite o justifica todos los hechos y las medidas de guerra que los radicales islámicos arrebatan (Sura 8:60) “Preparad contra ellos toda la fuerza, toda la caballería que podáis para amedrentar al enemigo de Allah y vuestro y a otros fuera de ellos, que no conocéis pero que Allah conoce. Cualquier cosa que la causa de Allah os será devuelta, sin que seáis tratados injustamente”.
El Islam es una ideología y un plan provocador que tiene como fin alterar el orden social del mundo entero y establecer uno nuevo que obedezca a los principios e ideales propios del mismo Islam. El propósito del Islam es fundar un Estado basado en su ideología y su programa, sea cual sea la nación que asuma el papel de transmitir las normas islámicas y sea cual sea el gobierno que resulte destruido durante el establecimiento de un Estado ideológicamente islámico. El Islam no tiene más que una cara, que es la del odio a todo judío-cristiano y a la civilización occidental. No dejemos engañar, todos los musulmanes, todos los que creen en el Corán, tienen el mismo pensamiento. No hay dos tipos de musulmanes ni existen musulmanes, ni mucho menos imames moderados. Un musulmán estrictamente simple es un musulmán que sigue la educación y las doctrinas del Corán. No se puede negar que hay musulmanes de buena voluntad, pero a pesar del Islam no gracias al Islam. Hoy día, no hay grupos que utilicen la violencia y la justifiquen en nombre de Moisés, Buda, Jesús, o de los dioses hindúes, pero sí es habitual que en nombre de Allah Akbar se asesine a otras personas, y que estos asesinos se justifiquen e ilegitimasen sus asesinatos ante sus correligionarios con textos del Corán y se amparen en la Shari´a o la ley islámica. Es cierto que no todos los musulmanes son terroristas, no es menos cierto que todos los terroristas son musulmanes, que todos aquellos que asesinan en nombre de Allah son musulmanes.
Raad Salam Naaman, Desvelando el Islam, editorial Monte Riego (León) 2012
Raad Salam Naaman
Cristino católico caldeo de origen iraquí