Se nos ha dicho que los actos de los terroristas islámicos son una aberración de la verdadera fe musulmana. Se ha dicho que los “los terroristas son para el Islam lo que el Ku Klux Klan es para el cristianismo” ¿Es verdaderamente este el caso, o están los terroristas actuando dentro de los límites de una cosmovisión islámica y una interpretación del Corán creída por muchos de sus clérigos?
Empecemos con la palabra “Islam”. Es una palabra árabe que está etimológicamente relacionada a la palabra hebrea “Shalom” que se traduce “paz”. En el mundo occidental, el entendimiento de “paz” difiere en gran manera de una persona del medio oriente. Para el oriente, la paz lleva la implicación de “tener la pie en el cuello del enemigo”, o sea “rendirse”, “sumisión”. Para el musulmán, la paz solo puede venir cuando hay una rendición y sumisión a Allah. La palabra Islam, literalmente significa: 1. Paz. 2. El camino para alcanzar la paz. 3. Sumisión. La palabra, en su sentido religioso, significa: completa sumisión a la voluntad de Dios. Afirma el Corán en (Sura 2: 136) “Decid: Creemos en Dios y en lo que se nos ha revelado, en lo que se reveló a Abraham, Isaac, Jacob y las tribus, en lo que Moisés, Jesús y los Profetas recibieron de su Señor. No hacemos distinción entre ninguno de ellos y nos sometemos a Él”, que cada uno de los profetas predicaba el Islam. Según el significado de la palabra Islam, El Corán tiene razón, porque es verdad todos los Profetas predicaron la Paz, la sumisión y la rendición a Dios. Sin embargo, ninguno predicó las doctrinas de Muhammad. Por lo tanto, yo creo que todos los seguidores de la doctrina de Muhammad, deben de llamarse Muhammadanos, no musulmanes, porque la palabra musulmán, es muy amplia, y se aplica a todo aquel que esta sometido o hace la voluntad de Dios, entre ellos, judíos y cristianos.
El mundo occidental, muy ignorante de la segunda religión más grande del mundo “El Islam”, ingenuos sobre las intensiones del Islam e ignorantes de su historia. La misma raíz del Islam está en la conquista militar, y el fruto que vemos hoy viene de esta raíz. El Islam, desde su mismo principio, fue propagado por “el filo de la espada”. La historia del Islam está repleta de violencia y guerra, desde su nacimiento hasta el día presente. Cuando los musulmanes invadieron España, se necesitaron siete siglos para sacarlos. Los turcos otomanos masacraron a un millón y medio de ármenos entre los años 19151916 (un hecho todavía ignorado por mucho del mundo occidental). En el Sudán, más de dos millones de cristianos han sido masacrados y muchos más vendidos como esclavos, todo bajo la dirección del General Umar Bashir (musulmán). En Indonesia, los musulmanes han matado a más de 300.000 católicos desde 1975. El genocidio y la persecución actual de los cristianos en Irak, Irán, Egipto, Pakistán, Nigeria…en el nombre del Islam y los musulmanes.
Yo no estoy ignorando las Cruzadas, los conquistadores españoles u otros acontecimientos hechos en el nombre de Cristo. Yo estoy bien consciente de los abusos del cristianismo en los siglos pasados y los encuentro bien repugnante. Pero yo no encuentro la conquista por la espada como el modus operandos estándar del cristianismo. Diferente a Muhammad, Jesús y sus seguidores no iniciaron la propagación de su fe por la fuerza militar.
¿Qué enseña el Islam con su concepto del Jihad?
Se pueden encontrar muchos mandatos en el Corán exhortando a sus creyentes a defender y propagar su fe. El carácter de esta defensa está determinado por como se interpreta la doctrina del Jihad (lucha por la fe), lo cual es discutido en muchos versículos del Corán. En un sentido es entendido como la lucha del individuo con su propia naturaleza para seguir los preceptos de Allah, pero no se puede negar que también se llama a una lucha literal por su fe. La doctrina del Jihad (guerra santa) en el Islam, divide al mundo en dos reinos, el que se habita en paz y el que se habita en guerra y hace que el creyente siga empujando la pared que hay entre los dos hasta que todo el mundo sea convertido al Islam. El que cae en la batalla se le promete entrada inmediata al Paraíso.
Déjeme citar del Corán. Al leer sus mandamientos es bien fácil ver la justificación de los terroristas islámicos a sus acciones. (Sura 9: 123) “Oh creyentes, hagan guerra contra los infieles que moran entre vosotros. Que ellos encuentren firmeza en vosotros”. (Sura 48:16) “Seréis llamados a pelear contra una nación poderosa, pelead hasta que ellos abracen el Islam”. (Sura 9:29) “Pelead contra aquellos que no creen…aunque sean Pueblo del Libro, hasta que estén dispuestos a pagar el tributo en reconocimiento de su estado de sumisión”. (Sura 9:5) “Pelead y matad al pagano en donde sea que te lo encuentres. Tomadlos, citadlos y esperadlos por todas partes”.
¿Es el Islam una religión de paz?
Las acciones de Muhammad, su historia y las palabras del Corán dicen otra cosa. Por lo tanto, la respuesta verdadera al terrorismo islámico no se encuentra en las armas físicas de guerra. Este es un sistema religioso que seguirá produciendo seguidores, quienes fielmente pelean el Jihad contra los infieles. Ellos no entrarán en el juego de “no te metas con nosotros y nosotros no nos meteremos contigo”. Va contra su religión.